Motivación para ponerse en forma
Ponerse y mantenerse en forma requiere arduo trabajo, disciplina y un compromiso por lograr tus metas personales. Durante diferentes etapas de nuestras vidas, ciertas metas de acondicionamiento físico pueden sentirse más difíciles (o fáciles) de lograr que otras.
Sin embargo, tu salud y bienestar deberían de ser una prioridad sin importar tu edad, y deberíamos aprender a entrenar más astutamente, no añadir más dificultades.
Por ejemplo, los hombres en la adolescencia y a principio de los 20 descubren que desarrollar y mantener su masa muscular les resulta más fácil, y notan los resultados con bastante rapidez después de comenzar un nuevo plan de entrenamiento. Sin embargo, los hombres en los 40 y 50 pueden notar que les toma más tiempo ponerse en forma y ver resultados, y muchos de ellos se dan cuenta que desarrollar músculos requiere más enfoque y dedicación que cuando eran jóvenes. Esto se puede deber al hecho de que los niveles de testosterona están en su punto máximo en los últimos años de adolescencia y bien entrados los 20, lo que hace que el desarrollo de masa muscular sea más fácil para el cuerpo. Sin mencionar que la energía y el tiempo libre extra que tenemos en nuestra juventud nos ayudan a llegar al gimnasio y mantenernos motivado con más facilidad.
La buena noticia es que sin importar la etapa de vida en la que te encuentres, el cuerpo tiene la capacidad de adaptarse y mejorar; e incluso, si estás ocupado, puedes encontrar formas de entrenar y obtener los mejores resultados de tu plan de ejercicios.
Estos son mis tres consejos para ayudarte a obtener los mejores resultados en tu travesía para lograr tus metas personales de acondicionamiento físico.
Sé específico
Es importante adaptar tu entrenamiento y tu actitud para que coincidan con las metas específicas que deseas lograr. Si quieres desarrollar músculos, tienes que entrenar de tal forma que agregues tensión significativa a las fibras musculares para estimular su crecimiento. Esto significa que a medida que tus entrenamientos comiencen a sentirse fáciles, tienes que incrementar el peso que levantas. Si quieres mejorar tu entrenamiento cardiovascular, tienes que seguir un enfoque similar. Cuando sientas que es demasiado fácil, tienes que pasar al próximo nivel.
Fija tus expectativas:
Todos somos individuos únicos con diferencias en genética, habilidades físicas, personalidades y niveles únicos de motivación para el logro. La motivación para el logro puede definirse como la forma en que una persona es impulsada por sus necesidades de tener éxito, hasta qué punto está dispuesta a llegar, y los obstáculos que está dispuesta a sobrepasar para alcanzar sus metas de acondicionamiento físico. Fijar metas que sabes que puedes lograr te mantendrá motivado y te ayudará durante esos días difíciles. Así que opino que es importante fijar expectativas realistas.
Sé responsable:
Considera reevaluar tus expectativas y motivación a medida que entrenes cada semana para seguir adelante. Esto te ayudará a adaptar tu entrenamiento en base a tus resultados, o la falta de estos. Tener un amigo o amiga con quien entrenar y que te haga responsable por tus resultados te ayudará a permanecer honesto en el gimnasio y, posiblemente, alimentará tu espíritu competitivo para que rindas al máximo. Así que trata de encontrar el compañero de gimnasio perfecto que entrene contigo.
Recuerda celebrar las “minivictorias” en cada paso del camino hacia tus metas de acondicionamiento físico.
Publicado por Samantha Clayton, AFAA, ISSA –
Vice President, Worldwide Sports Performance and Fitness